Los Arcanos Mayores, con su viaje o ronda del tarot, mostrarán al Hombre que, del nacimiento a la muerte, pretende comprender “el porqué de su existencia”, “los objetivos de su vida», y «sus motivos para vivir». Este Hombre estará personificado por EL LOCO (el arcano sin número o también señalado con el cero); es el eterno viajero que camina hacia lo desconocido para satisfacer el vacío de su vida. A medida que los encuentre, los arcanos le contarán una historia que inicia en los limbos del Cosmos; antes de que existiera el Universo, para terminar en la apoteosis de EL LOCO (es decir que es un círculo infinito, cíclico; de ahí que se le llame ronda del tarot), cuando entra victoriosamente en el Santuario sagrado de Dios, pero ya transformado. Así, el Loco para por cada una de las cartas o arcanos mayores, que son, del 1 al 21, en dicho orden:
El Mago, La Papisa o Sacerdotisa, La Emperatriz, El Emperador, El Papa o Sumo Sacerdote, El Enamorado o los enamorados, El Carro, La Justicia, El Ermitaño, La Rueda de la Fortuna, La Fuerza, El Ahorcado, La Muerte (o sin nombre), La Templanza, El Diablo, La Torre, La Estrella, La Luna, El Sol, El Juicio, El Mundo (carta XXI). Selecciona tu lectura de cartas gratis.
Contando al loco que es el 0 (cero), son en total los 22 arcanos mayores.
El viaje del héroe en el tarot o «el viaje del Loco» y los arquetipos
Los arcanos, mostrarán cómo se desarrolló la creación del Universo y revelan las leyes que lo rigen. Su conocimiento es indispensable para comprender las energías que dirigen la vida, en general, y al consultante, en particular.
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La ronda del tarot o la historia del viaje de los arcanos
En la historia que nos cuentan los arcanos a través de las cartas, hay narrativa, exploración, análisis interno y conciencia. Los personajes harán resaltar las razones profundas que presidieron a la Creación del Hombre: conocer el sentido de la vida, saber ayudar al consultante en la búsqueda de su verdad a través de las fluctuaciones de su existencia, es lo importante en la lectura del tarot.
Indicarán los arquetipos, las 22 etapas del conocimiento que le permitirán al Hombre encontrar su Unidad y su Origen divino. Así, el tarólogo o tarotista podrá comprender las pruebas que el consultante debe atravesar en su propia evolución.
Una especificación final antes de empezar a vivir con EL LOCO su aventura fantástica en la rueda del Tarot. La persona posee, por su naturaleza, una dualidad fundamental que se expresará por:
El Alma humana-animal, la conciencia del ego, el «TỨ», es decir lo que le permite conocer y existir individualmente en el plano material diciendo: ¡YO, YO, YO!
El Alma espiritual, que es el Alma propiamente dicho, el «NOSOTROS», es decir esta Chispa divina que habita en el Hombre y que le permite aspirar al plano divino.
En derivación, se oculta sutil y presente detrás del Alma humana-animal, un principio viviente que es la “CONCIENCIA” de la existencia, el YO que le permite a cada uno para conjugar su vida diciendo: ¡YO ESTOY presente en MÍ y yo existo! Esta CONCIENCIA, elevada a un plano superior del Alma, podrá decir universalmente:
«¡YO ESTOY presente en NOSOTROS!”
Fuerzas arquetipicas, símbolos y significados
Relacionado con la psique, el viaje a través de las cartas del Tarot, es básicamente un viaje a nuestra propia profundidad. Cualquier cosa que podamos encontrar en este viaje es, en el fondo, un aspecto de nuestro más profundo yo, como Jung lo hizo ver.
El loco, al principio pero a la vez al final, abre y cierra el viaje, es el número cero.
